Fui a hacer un trámite. Cuando vuelvo hacia mi casa, voy a tomar el micro. Me han dado ganas de ir al baño. Pienso "voy al bar de la otra vez, para que pueda cambiarle el agua a la aceituna". Pero resulta que me dice la chica del negocio:
--Es para clientes. No lo puedo dejar entrar...
--Pero si yo vine la otra vez. Mirá, te digo donde es el baño y todo. No sé porque son tan poco solidarios, eh.
--No puedo dejarlo.
---Está bien. Jamás volveré aquí.
Y me fui embroncado. Parece que hay gente que es mala, todavía. Yo puedo estar con una urgencia importante. Pero bue!...como dice el rock "todo se pasa por atrás...". En fin...
A la tarde voy al supermercado con mi hermana.Llevo el carrito, y una "niña",-pero como de 40 años-me mira y dice, como para si(pero yo estaba al lado, eh)
--¡No hay nada de aceite!
Y pienso para mis adentros "yo te mediría el aceite...nena"...ja!
Me acerco y comento:
--Bue!...¿cuál es el mejor, el de oliva?...
--Pero no hay nada...
Entonces, ya me tenía que ir.Me voy no más. La chica no habló más. Podría preguntar otra vez, .En fin, le dije otro comentario, pero agarró su "ford taunus", y tomó por la "panamericana"...ja!
Después, con mi carrito le hago la pasadita. Y me acerqué a otra, y le toqué bocina...pi-pí-pi!!!..Nada...No acusa recibo. Ja!. Por ahí, casi choco con otra:
--¡Fijate dónde pones el guiñe!...che....
Seguía hasta comprar todo. Me encuentro con mi hermana, y llegamos a la caja. (Peaje). Ahí pagamos y nos venimos. Aunque usted no lo crea. De Ripley. En la dimensión desconocida.
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