Corría el año 1991. Agosto 10, cumpleaños de mi madre. Y en esé día, vino un "investigador" a mi casa, a almorzar. Venía con una pareja de jóvenes- un hombre y una mujer- . Charlamos sobre ovnis y esoterismo. Esa misma tarde, me fui con él -Ricardo- a una radio local, a hablar sobre el tema. El "ufólogo" estuvo hasta julio de 1992, yendo-cada un tiempo- a mi casa de San Martín. El 15 de julio de 1992, me habla por teléfono y me dice:
---Oscar, no podemos ser más amigos...si quieres,en algún momento, podemos tomar un café...
Me llevó a Isidris, y a ver a un astrólogo. Y a ver a otro esoterista. Pero el joven de unos 33 años, no me gustaba. Es decir,me caía mal. Daba consejos todo el tiempo. Y a mi madre,también. Estuvo en la casa de una amiga, y a ella, también la aconsejaba. ¿Quién era este individuo?. Uno más, de los tantos extraños que pasaron por mi casa. Una casa que debe de haber registrado-sin mentir, eh- 500 personas, fácil, de todo tipo de talentos, personalidades, aspectos humanos, calaña, y enorme valor humano. ¿Los Ferreyra fuimos en aquella ciudad una especie de consultorio sentimental y psiquiátrico?. Pareciera que una vez terminada la etapa, en 2005, nos embarcamos, por lo menos yo, en un nuevo camino que aún continúa...
No hay comentarios:
Publicar un comentario