El querido "flaco" era siempre oportuno, y a veces,diría, directo y decía las cosas "sin anestecia", pero de forma siempre simpática, aunque a veces expresara enfado y antipatía. Por ejemplo, había venido a casa un amigo de la familia, -ya fallecido- y lo miraba y miraba, mientras hablaba. El amigo nuestro se va. Lo mira a mi viejo y le dice:
---´¡Que máquina de hablar huevadas!..
Cuando no le gustaba una postulante a reina de la Vendimia, nos decía.
---Le duele la cara a la de-por ejemplo- Luján
Hablábamos de sexo. Y no se como se metió el asunto del esoterismo y la vida después de la muerte. Estábamos como incontables tardes y noches, en la parecita de ladrillos de entrada de nuestra casa, donde nos tomábamos muchas veces, unos vinos, coversábamos, reiamos, criticabamos a todos, etc....En eso, el flaco se mira a sí mismo y le dice a mi papá y mi madre
---Yo ya no creo en la reencarnación....jaaa....
Un día voy a viajar a Buenos Aires,T yo tenía 19 años, y me dice
---Vos andá a Corrientes al 1000....---
Claro, ahí hay una cadena de prostibulos y cabarets.....
Un día se entera que unos vecinos muy conocidos de todo el barrio, y por cierto, de él y su esposa, andaban muy mal. Se peleaban feo,muy feo. Y le dice a mis padres
--El Horacio la mató a la señora, y la enterró en el patio---humor negro.
Como el flaco no laburaba, nunca lo hizo, y solía estar parado en el hall de entrada de su casa, fumando su cigarrillo de rigor, baja de un auto un amigo de él, le grita
--Che..fkaco...¿qué vas a hacer de comer'--
Y le contesta fríamente y con seguridad
---Asado...---
Asi como estas hay muchas anécdotas más. Las iré recordando con el tiempo.
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