A las 18 hs, de la tarde, mas o menos, me tomo el micro con un bolso, y llevo dentro mis prismáticos. Me voy al Parque General San Martin, a ver pájaros. Llego y antes, me tomo un café con leche, en el bar de Los Caballitos de Marly. Y después, me pongo a caminar por el bello paisaje del Parque. Veo un perro. Lo tomo con mis binoculares. ¿Es un perro o el chupacabras?. Negrooo...y me mira. Pero por la distancia, parece un gato. Qué cosas me siguen pasando. Cómo me divierto,y solo. Entonces. Cuando lo vuelvo a enfocar, se las tomó. Pista. Y sigo viaje. Camino por el prado. Me encuentro, con una parejita de novios,que juegan a la pelota con su hijito. Les hablo, y le pego a la pelota.Hacia mucho que no hacia esto. Después de dos palabras, veo el prado. Me siento vivo en él. Miro los árboles. Veo algunos pájaros.Y voy por un sendero. Me siento en un lugar que es justo en el que estuve la semana pasada con Noelia. Alli, me siento contra un árbol. Medito. Me emociono. Veo la luna. Con los binoculares. Y en árbol, nueve palomas. Las "fotografio" con mi vista. Hermosas. Medito. ¿Qué vida estoy viviendo?.Me siento más vivo,alegre y confundido que nunca. Entiendo poco, y siento mucho. Amo todo lo que veo,lo que hago, me apasiono por todo. Siempre fui asi, pero ahora es es-pe-luz-nan-te. Maravilloso y perturbador a la vez.Me deestructuro rápidamente.
Llego a un negocio. Pregunto si hay helados. Me dicen que no. Y me sañalan dónde hay. Voy a un carrito. Y me pido un helado de chocolate con crema, y pistacho. Me siento y en la mesa, hablo con un matrimonio. Me pregunta la chica si soy de acá. Y le pregunto si hay algún espectáculo para ver en la noche.Pero no me quedo.Sigo caminando y me lavo las manos en un bebedero. Veo algunas féminas muy bonitas.,Pregunto algo, pero sigo viaje. Me vuelvo a pie. Y aqui estoy, escribiendo una nueva crónica, en una nueva noche en la que dormiré pensando en haber logrado otro día, de alegria y de algo de confusión. Pero, nuevo, al fin.
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