Desde hace tres años y medio, asisto a un café de personas destacadas de Mendoza, en el arte, la cultura, el cine, la literatura, y el periodismo. Al principio, nos juntábamos en el café de Rivadavia y San Martin, que se llama Liverpool. Ahora, y desde hace un año y medio, nos reunimos en la calle Espejo, café La Barca.
Uno de los más cómicos es Carlos Levy, que suele contar chistes judíos. Pero una vez, estaba en Liverpoo, y la mesera le pregunta:
---¿Qué va a tomar?..--
Y la mira fríamente, y le contesta:
---Una sopa---
Y eso que eran las 10 de la mañana, eh. Ja!.
Una vez, Julio le pregunta a Carlos, robusto, grandote:
---¡Escucháaa!...¡cada día estas más sordo!
Y Carlos le responde:
---Si...si...ya voy a empezar a adelgazar..--..
Yo estoy en La Barca, y el mozo habla de qué la gente no es agradecida. Y que otros mozos son buenos, con la gente. Y salto yo y digo:
---Era buen mozo...¡pero tenía granos en la cara!....---
Un día le dije yo a Emilio:
--Las jóvenes ahora tienen celulitis..¿viste?..
--.¿Por qué?..--
.--Todas andan por la calle, hablando con los celulares....--
Hablo con Luis y le digo:
...--¿Sabes jugar al ajedrez?..--
.-..Si, y con la computadora, también.--
-- Yo también. Me dicen Boby...--
.--Por lo loco!..--
.--No, porque soy un perro, jugando!...---
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