Luego de asistir al café ufológico de Mendoza, el miércoles 26 de diciembre último, siete miembros del mismo abordamos cuatro autos y nos fuimos al norte de Mendoza, a Canota. Yo fui en la cuatro por cuatro, de Ariel Godoy y a medio camino todos, -él y los tres coches, el de Pablo Peralta, y Juan Lima y Martín Fuentes.- nos paramos a comprar dos pizzas y papitas fritas. ¡Qué noche,Bariloche!.
Con Ariel, mientras tomábamos una gaseosa, charlábamos de ovnis, esoterismo, anécdotas, etc....Y nos haciamos amigos. Estuvimos con 30 personas conocidas y amigas en común, a lo largo de 30 años. Una vida ufólogica y esotérica, muy similar. Pero cuando ibamos cerca de nuestro lugar de encuentro, donde todos pasariamos una velada simpática, de observación y amistad, vemos una luz blanca-celeste que aparece de repente hacia el oeste. ¡Un flash-ovni!. Ariel, se detiene. Y los demás, también . El ovni fue visto por varios. Y quedamos en que era ovni,porque no lo identificamos. Pero para mi, fue un objeto extraño, sin tener que ver ni con satelite ni estrella. Era un fogonazo. En tres meses, vi catorce como éste.
Al llegar a un rescoldo de la ruta, nos paramos todos. Ahi no mas, tomamos nuestrso prismáticos-llevamos dos o tres- y vimos el cielol Y charlamos. Hicimos todo tipo de chistes.Pór cierto, empecé yo con la joda, Queria terminar bien el año. Y lo hice, Lo hicimos todos. Comimos pizzas. Ahi la pusimos a ella, -a la comida que nos esperaba desde temprano- sobre el capot de uno de los autos. Veíamos el cielo y la lontananza del pedemonte. Eran las dos y media de la mañana, Partimos a nuestras casas. . Todos contentos. Parte del café ufológico de Mendoza.Un fin de año felices. Con deseos de seguir en esta travesía. La de la amistad, el estudio y la investigación.
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