-.--Hola que tal!...--
Hay una joven como de 23 años. Le sigo hablando:
.---Es nueva esta librería. ¿Hace mucho que está?.--
--No, hace poco-.--
---.Me gusta la iniciativa. Esta bueno que aquí halla una librería. --
..Si, gracias.--
--Porque la juventud está haciendo cosas nuevas---
--Si,--
--¿Sos de aqui?..--
--No, de San Martín--
La miro. Otra coincidencia. Cómo si fuera sólo eso. En fin....
--Ya también soy de allá...¿cuál es tu apelllido?.--
--De agostino----
Me dice.
--Ah...yo conozco a alguno.Pero no sos de mi generación. Debo haber conocido a tus padres.(Hay tantos que ,da igual; seguro que ha sido o es algún conocido. Entre tantos con los que hablé, con los que comparti, no me extrañaría....la ciudad es grande,pero yo petié tanto la calle, que no me resultaria de otro planeta nadie que aparezca aqui, con el cual, haya estado alguna vez, varias horas.) En fin..
De hecho, aqui en la cuadra hay dos o tres personas que son de San Martín. Anque usted no lo crea, de ripley.
.
Luego le comento que ella por lo que veo,también vende biyouteri, y que yo hice hacer para mi cuello, una estrella, con la letra A.Le muestro la medalla. Ella la ve, sin mucho interés. Sólo le apunté que fui a la plaza Independencia, para que me la hagan, y que es algo parecido a lo que ella vende en su negocio..
Bueno, hablo dos o tres palabras mas con la chica, la vendedora, y le comento:
---Me gustária comprar cartulinas, y lápices de colores de madera....porque dibujo y pínto....--
La saludo y me saluda. Me voy con una novedad de último momento. Un nuevo negocio en mi cuadra. Todo es posible en la dimensión descocida. ¿Qué no es real?. Y esto, es sólo el principio, amigos...
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